“Yo sí le puedo decir al ministro con quién hablamos nosotros”. Lo hacemos con cientos de miles de autónomos a los que les gestionamos sus impuestos y pagos a la Seguridad Social, a quienes llevamos acompañando mucho tiempo, en las duras y en las maduras. No sólo nos cuentan sus penas y alegrías, es que conocemos su situación económica y financiera», continúa Santiago. “Le aseguro, señor ministro, que los autónomos con los que hablamos, en su gran mayoría, están asustados. El anuncio de nuevos impuestos, directos e indirectos, considerando las cotizaciones como un impuesto directo más, el crecimiento del IPC, el salario mínimo interprofesional, la subida de las materias primas, tienen a los autónomos acongojados”.

El presidente de los Gestores Administrativos le pide al ministro que haga caso de su “jefe” e intente de verdad no dejar a nadie atrás. “Si comparamos los esfuerzos que se están haciendo con los trabajadores por cuenta ajena frente a los que se hacen con los trabajadores por cuenta propia (autónomos) nos damos cuentas de que el mensaje del ministro es el que no tiene credibilidad, como con tanos otros anuncios que sus compañeros de gobierno se han ocupado de desacreditar”

Santiago señala que no entiende qué justicia contributiva plantea el que autónomos con ingresos mensuales por debajo de los 600 euros deban pagar 183,60 euros en 2031 (que será el momento en que empiecen a pagar cuotas más bajas). “El ministro debería empezar a entender la presión fiscal global que soporta un autónomo, y si quiere aplicar un sistema justo debería considerar la opinión de todos los autónomos. ¿De verdad busca la justicia contributiva o tan solo que los ingresos de autónomos rescaten el déficit de la seguridad social?” se pregunta Fernando Santiago. Para el presidente de los Gestores Administrativos, “los autónomos con los que nosotros hablamos no están contentos, pero ni con el sistema que ha propuesto ni con el trato fiscal actual que se les da”. “De momento, está usted dejando atrás a cientos de miles de autónomos. Le falta calle, ministro”, remata Santiago.